miércoles, 3 de septiembre de 2008

Tengo una cita conmigo, que no me atrevo a afrontar
(Entran Benvolio y Romeo.)

Benvolio:
Así es, muchacho, un fuego apaga a otro,

la angustia de otro calma nuestra pena,
si giras al revés se va el mareo,
un gran dolor se cura si otro sufre.
[...]

Romeo:
Las hojas de llantén son excelentes.

Benvolio:
¿Para qué, por favor, es la receta?

Romeo:
Para cuando te rompan las canillas.

Benvolio:
¿Estás loco, Romeo?

Romeo:
No, no estoy loco, pero más que un loco
atado, en mi prisión, sin alimentos
me siento atormentado y azotado
Y además ...


Romeo y Julieta, William Shakespeare, pág. 50, acto primero, escena segunda

(Julieta despierta.)

Julieta:
Padre de los consuelos, dime: dónde
está mi esposo? Yo recuerdo bien
la cita. ¡ Y aquí estoy! ¿Y mi Romeo?

(Ruido adentro.)

[...]

(Sale.)

Julieta:
¡Vete de aquí! ¡Yo no me moveré!
¿Que es esto? ¡Es una copa apretada
en la mano ya fría de mi amor!
¡Ah, fue el veneno que causó su muerte!
¿Porqué te lo bebiste todo, ingrato,
sin dejar una gota para mí?
¡Voy a besarte para que tus labios
si han guardado una gota de veneno
me maten con el beso que te doy!

(Lo besa.)

¡Estan tibios tus labios todavia!

Guardia 1ro: [...]

Julieta: ¡Oigo un ruido! ¡Me queda poco tiempo!
¡Oh, querido puñal!
(Toma la daga de Romeo)
¡Esta es tu vaina!
¡Aquí te quedarás! ¡Dame la muerte!

(Se hiere. Cae sobre el cuerpo de Romeo y muere [...])

Romeo y Julieta William SHakespeare, pág 208-209. Acto V, escena tercera




No te pongas trsite corazón, quedate tranquila que va a aver, tiempo para bailar




Porque te ganaste el cielo, y nos cubriste a los dos, i no me olvido de tus caricias, y no me olvido de tu dolor, que pensaste en nosotros pirmero no te acordaste solo de vos


El es un hombre con suerte-